Un final de temporada
La primera vez que leí a Alejandra Carrillo, en 2018, no fue en ninguno de los periódicos donde ha colaborado: fue en su blog personal con el ensayo “Sin Tinder en La Occidental”. A esta “Trabajadora textual” -como se presenta ella su en twitter-, no le costó trabajo meterme en su cabeza, ni ver desde sus ojos mientras narraba y le ponía cara a todos y cada uno de los hombres con los que salió después de un doloroso rompimiento. Mentiría si dijera que fue en ese momento en el que manifesté (como dice la chaviza) que algún día tendríamos una colaboración. Pero entre las letras de su blog, las de sus tuits, y luego las de nuestros mensajes en privado, estaba forjando una amistad.
Cuando empezamos a cocinar la tercera temporada de Esto no es radio a finales de 2020, Mitzi Pineda me dijo que Ale tenía una historia buenísima. Tan buena que, para cuando Ale nos pasó el pitch formal -la propuesta de la historia-, ya era mero trámite.
Y es tan buena, tan universal, tan dolorosamente tierna, que a la hora de escoger en qué número de episodio aparecería, fue unánime la decisión de ponerla como cierre de temporada.
Vivir en México, ser de México y tener un horizonte que a veces te da un madrazo en la cara para irse corriendo nos ha llenado de tanta masa agridulce que, al interior del equipo bromeamos con lo irónico de que este episodio lo consideremos “ligero” dentro de lo ominosamente luminosos que suelen ser nuestras historias (tendrán que escucharlo para saberlo, lo siento). Spoiler: no es nada ligero.
El resultado es este episodio, con el que llegamos al final de la tercera temporada. Espero que lo disfruten:
En 2018 Darío Pereira y su mamá Azucena Adela, hicieron un viaje para conocer Europa. Pero también para ir tras las huellas del papá de Darío. Esta es la historia De una familia compuesta por una madre e hijo que un día deciden cruzar el atlántico para reencontrarse con una vieja historia de amor interrumpida abruptamente y escarbar en las raíces de un apellido. La periodista Alejandra Carrillo nos cuenta esta historia
“Los muertos siempre son buenos”, último episodio de nuestra tercera temporada ya está disponible en tu plataforma de podcast favorita.
He recibido grandes comentarios de grandes personas sobre que esta tercera temporada ha sido su favorita. Me gusta escuchar eso. Me hace pensar en este podcast como un grupo musical que saca un álbum del que las escuchas van escogiendo su canción favorita. Porque eso fuimos para esta temporada: una banda, la mera banda. Un equipo al que siempre le voy a estar agradecido por la pasión y talento que le imprimieron a este podcast que cuenta historias para seguir viviendo.
Mitzi, Sandra y Luis: les quiero harto y no saben cuánto les admiro y les agradezco por hacer de esta una temporada fenomenal.
Le agradezco a Mónica Vargas Michel, Vivian Cárdenas y Manuel Tenedor por las ilustraciones, a Tomás Hernández, Karen Kimpleton, Luis Raúl López y José Meyer Ibarra por la música que le dio vida a estos episodios.
A los periodistas José Carlos Toral, Cristian Pinto, Alejandra Carrillo por su generosidad y por confiar en este proyecto para contar sus historias en y desde esta casa productora llamada Esto no es radio.
También a toda la gente que ha aparecido en este podcast y a quienes hemos agradecido en cada uno de los episodios en los que han aparecido.
Y a ustedes que escuchan este podcast, claro que sí.
Escuchen en este enlace, o donde sea que escuchen sus podcasts.